Dia 15.

A las puertas del sueño.

Se empezó el día con la incertidumbre si me harían el dichoso PCR, y a las 8´30 como me dijeron, puntal como un clavo en la cola estábamos, a principio que esperara, luego que valía 300 euros, luego que a los mejicanos se les cobraba eso…ehhhhhh, que soy español y europeo coh´ones, me piden pasaporte y número de teléfono, el implícito, y nunca mejor dicho apuntador otra vez me hace esperar, a la media hora vuelve con más papeles, “pienso”, eso es bueno, y acerté, relleno los papeles y me dice ok, a los cinco minutos una enfermera me enseña como a los toros las banderillas y a meter bastoncillo(lo odio),cinco horas después tengo los resultados ¡¡perfecto¡¡para poder entrar en Noruega mañana si Dios lo quiere.

No todo podía ser todo bueno, ¡¡o si¡¡.

El día de hoy fue tremendamente complicado en lo que se refiere a la conducción en vespa, pues salimos del hotel ya lloviendo significativamente, en la prueba arrecio un poquillo, y en carretera fue brutal, las oleadas de trompas de agua que cayeron, algunas acompañadas de un viento racheado que me hizo muy mucho pensar en parar hoy, encima estas carreteras tan rectas tienen los carriles muy significados en algunos tramos más bien parecen dos surcos con baches de propina y meterte ahí con la vespa es pasarlas canutas, así que me tome con paciencia el día de hoy y al almuerzo le dimos su tiempo, poco a poco parecía que se iba arreglando la cosa pero hasta Saariselka no las tenia del todo claro, luego empezó a mejorar y en Inari tenia el final hoy me hice cincuenta kilómetros más de propina, no si antes pararme dos o tres veces para observar el impresionante lago que es el segundo más grande de Finlandia, situado en la parte septentrional de Laponia al norte del Círculo Polar Ártico,  así que hoy 355 kilómetros, los mismos que me quedan mañana para la bola, aunque a lo mejor lo dejo para pasado y así la veo mucho más descansado y con tranquilidad.

Ser felices.

Manuel Martin (MAMU_56)